En frente, el bronce mantiene al poeta en una mesa del bar Sorocabana mientras los vientos doblan campanas. Daniel Salzano observa con mirada perenne desde su libro de amador, desde su barrio Los Naranjos la fotografía de Santiago Solans. Sugestiva e impactante, en blanco y negro, la esquina de los tiempos.
Esa esquina donde los cordobeses pisan su tonada. En esa esquina, la más cordobesa de la ciudad es donde las calles San Jerónimo y Buenos Aires se cruzan para decir Córdoba capital.